martes, 9 de octubre de 2018

Callosidades y callos


¿Qué son las callosidades y los callos?

Las callosidades y los callos son zonas de piel gruesa causadas por presión o fricción. Pueden causar dolor al caminar o usar zapatos.
Las callosidades suelen formarse en las manos o los pies. Por lo general, no necesitan tratamiento.
Los callos tienen un núcleo interno que puede ser blando o duro. Los callos suaves se encuentran entre los dedos del pie. Los callos duros pueden formarse en la parte superior de los dedos del pie. Los callos causados por zapatos que le queden mal a menudo desaparecen con el zapato de tamaño correcto.
Vea imágenes de callosidades y callos duros y blandos.

¿Qué causa las callosidades y los callos?

Las callosidades y los callos son causados por presión o fricción repetida en una zona de la piel. La presión hace que se muera la piel y que se forme una superficie dura de protección. Un callo blando se forma del mismo modo, excepto que cuando queda sudor atrapado donde se forma el callo, el núcleo duro se ablanda. Esto suele ocurrir entre los dedos de los pies. Las callosidades y los callos no son causados por virus y tampoco son contagiosos.
El manejo repetido de un objeto que ejerza presión en la mano, como herramientas (azadón de jardinería o martillo) o equipo deportivo (raqueta de tenis), generalmente causa callosidades en las manos.
Las callosidades y los callos en los pies son causados a menudo por la presión del calzado. Caminar descalzo también produce callosidades.
Las callosidades y los callos a menudo se forman en los juanetesdedos de los pies en martillo, garra o maza, o en los abultamientos causados por la artritis reumatoide. Las callosidades y los callos en los pies también pueden ser causados por la presión repetida en los deportes (como la callosidad en la planta del pie de un corredor), por una forma rara de caminar (marcha anormal) o por una estructura ósea, como pie plano o espolones en los huesos (pequeños crecimientos óseos que se forman en las articulaciones).

¿Cuáles son los síntomas?

Usted puede determinar si tiene un callo o una callosidad por su aspecto. La callosidad es dura, seca y gruesa, y puede verse grisácea o amarillenta. Puede ser menos sensible al tacto que la piel que la rodea y sentirse abultada. Un callo duro también es firme y grueso. Puede tener un anillo amarillento blando y un centro grisáceo. Un callo blando se ve como una llaga abierta.
Las callosidades y los callos no suelen ser dolorosos, pero pueden causar dolor al caminar o usar calzado. Y pueden dificultar que sus pies quepan en sus zapatos.

¿Cómo se diagnostican las callosidades y los callos?

Su médico examinará las callosidades o los callos que le estén causando problemas. También puede preguntarle sobre su trabajo, sus pasatiempos y el tipo de zapatos que usted usa. Si su médico sospecha que puede haber un problema con los huesos, se puede hacer una radiografía del pie.

¿Cómo se tratan?

Las callosidades y los callos no necesitan tratamiento a menos que causen dolor. Si de hecho le causan dolor, usted puede aliviarlo al:
  • Usar zapatos que le queden bien y sean amplios, con puntera (la parte que rodea los dedos del pie) ancha y profunda.
    • Una puntera más amplia evita que los dedos presionen el uno contra el otro, reduciendo la presión sobre los callos blandos.
    • Una puntera más profunda evita que los dedos presionen contra la parte superior del zapato, reduciendo la presión sobre los callos duros.
  • Utilizar relleno de protección mientras el pie se cura, tal como:
    • Almohadillas protectoras (como "moleskin").
    • Separadores para los dedos.
    • Almohadillas para los dedos.
    • Capuchones y fundas para los dedos.
Otras cosas que puede probar incluyen:
  • Reducir el tamaño de la callosidad o el callo remojándolo en agua tibia y luego usando una piedra pómez para desgastar ligeramente la piel muerta. Nunca se corte los callos o las callosidades usted mismo, especialmente si tiene diabetes u otras afecciones que causan  problemas circulatorios o entumecimiento.
  • Hacer que su médico recorte la callosidad o el callo con un cuchillo pequeño. Su médico le puede hacer esto en su consultorio.
Si sigue teniendo problemas con callosidades o callos, o el problema es grave, su médico puede hacer que usted consulte un especialista en pies (un podólogo). Puede probar plantillas ortopédicas o plantillas metatarsianas a medida para sus zapatos, para distribuir su peso de manera más uniforme sobre su antepié. Los atletas que corren mucho pueden usar plantillas ortopédicas para el mismo propósito.
Rara vez se utiliza la cirugía para tratar las callosidades o los callos. Pero si una estructura ósea (como un dedo en martillo o juanete) está causando una callosidad o un callo, la cirugía puede usarse para cambiar o eliminar la estructura ósea. Esta se usa solamente si han fracasado otros tratamientos.
Si usted tiene diabetesenfermedad de las arterias periféricasneuropatía periférica u otras afecciones que causen problemas de circulación o entumecimiento, consulte con su médico antes de probar cualquier tratamiento para callosidades o callos.

¿Cómo pueden prevenirse las callosidades y los callos?

Las callosidades y los callos pueden prevenirse reduciendo o eliminando la presión sobre la piel.
Las callosidades en las manos generalmente se pueden prevenir usando guantes para protegerse las manos, como cuando trabaja en el jardín o levanta pesas. Las callosidades en los pies en general se pueden prevenir usando zapatos y calcetines que le queden bien.
Los callos en los pies normalmente se pueden prevenir con el uso de zapatos que tengan una puntera más amplia. Y también haciendo que el empleado de la tienda de zapatos le mida ambos pies antes de comprar un par de zapatos.
  • Use zapatos que le calcen bien.
  • Use guantes al usar una herramienta como una azada o un rastrillo de jardín. Si expone otras partes de su cuerpo a la fricción, use acolchonamiento apropiado. Por ejemplo, si está de rodillas instalando alfombra, use rodilleras.
Su modo de andar puede verse afectado por los huesos de sus pies o incluso pantorrillas tensas. Si es así, es posible que un podólogo pueda ayudarle a hacer cambios que puedan prevenir problemas en los pies, como callosidades y callos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario